La etapa 39 del GR 14, más suave y corta que las anteriores, comienza en la localidad de Vilvestre abandonando el pueblo en dirección sur. De este modo, pasamos cerca de las piscinas y, a la altura de un abrevadero, el sendero enlaza con una pista pedregosa por la que, poco a poco, deja atrás el caserío para introducirse en un bosque de encinas dispersas. Allí, el sendero se estrecha un poco para seguir su itinerario por camino de piedra suelta.
El sendero llega a un vallejo de vegetación más llamativa y, tras superarlo, va a parar a paisaje abierto. Aparecen en el camino los casitos o casetas de pastores mientras el GR 14 avanza por pistas más cómodas. Poco a poco, los muros de piedra van estrechando el camino mientras continuamos entre campos de almendros y fincas invadidas por escobas. La estrecha senda enlaza con una pista de concentración parcelaria y, con un giro a la izquierda y otro a la derecha, llega hasta un camino de mayor entidad, con fincas más amplias y mayor separación entre muros.
Más adelante, el sendero encuentra la carretera SA-330, por donde seguimos en dirección a Saucelle, entrando en la localidad por la parte trasera del polideportivo. Así, atravesamos el centro del pueblo y, tras cruzar la carretera, encontramos un mirador con dos bancos de madera con vistas a la campiña colindante. Justo el punto donde termina esta etapa 39 del GR 14.