El Parque Natural de la Sierra Norte de Guadalajara presenta una diversidad paisajística y cultural excepcional, en sus 117.898 hectáreas, que incluye sierras y macizos con elevados picos en su serranía norte, y que son el nacimiento de las cuencas hidrográficas de los ríos Jarama, Jaramilla, Sorbe, Bornova y Lozoya. Su enorme variedad litológica y su diversidad climática nos revelan un elevado número de ecosistemas en los que la flora y la fauna presente le dan todavía un mayor valor natural.
No obstante, el nombre del sendero se debe al valor cultural y etnográfico que encierran los pueblos incluidos dentro de este parque, cuyos orígenes históricos se remontan al siglo VI, con el asentamiento de los pueblos visigodos en la península. Su arquitectura especial se caracteriza por el uso masivo de la pizarra en muros y cubiertas, su conformación sin muros interiores y su hermetismo debido a las extremas condiciones climáticas.