Llevo varios días pensando si escribir sobre esta noticia, y creo que es hora de decir lo que desde Senderos GR pensamos.
El día 5 de marzo de 2012 el periódico CincoDías hablaba de una noticia que estremeció mi alma, pero ya no solo eso. Como persona dedicada al mundo empresarial y, en especial, al marketing, me supuso un enfado tremendo por lo que supone para el desarrollo empresarial de una región.
Dicha noticia habla de la construcción de la mayor pista de esquí del valle de Aragón, una pista que unirá Candanchú, Astún y Formigal, llegando a convertirse en el octavo dominio del mundo de pistas esquiables.
Su capacidad estimada es de 40.000 usuarios diarios y contaría con una capacidad de transporte de 100.000 personas diarias. Dicha iniciativa corre a cargo del Gobierno de Aragón, propietario, junto con Ibercaja, de la estación de Formigal, y que poseen juntos el 50 por ciento del grupo empresarial de turismo y nieve Aramón. La inversión a realizar está estimada en unos 42 millones de euros.
La razón de dicha inversión es que se estima que el sector del esquí supone el 10 por ciento del PIB de Aragón y que el plan de amortización se estima en entre 20 y 30 años. Y no contamos aquí con las inversiones en nuevas carreteras, autopistas y túneles que vendrán justificados para facilitar el acceso a Francia.
Hasta aquí todo es bonito y maravilloso pero hay personas que parece que no se han dado cuenta de lo que esto supone, ya que resultará en el destrozo del medio natural del Pirineo y el incremento de servicios como hoteles, cafeterías, apartamentos etc., en un lugar que debiera ser protegido por el bien de nuestros sucesores.
Pero es más, dicho proyecto se basa en algo completamente aleatorio: la nieve. Y si hay algún año que no nieva, o que no nieva lo suficiente, hablaríamos no solo de un mal año, hablaríamos de pérdidas para todos esos negocios dependientes solo del clima, lo que se traduciría en un terrible fracaso.
Desde Senderos GR estamos dispuestos a ayudar a la mejora del desarrollo de los pueblos, de una manera sostenible. Pero en cuanto a este tipo de iniciativas nos posicionaremos siempre en contra ya que no responden a la necesidad de los usuarios. Si lo importante es el esquí por encima de la naturaleza, pueden construir una pista de esquí artificial en Huesca u otra población. Pero lo importante es disfrutar de la naturaleza y si nos quitan eso y lo transforman en un complejo turístico al puro estilo Las Vegas se darán cuenta de que van por el camino erróneo.
Es más, si quieren podemos hablar del famoso aeropuerto de Huesca que iba a ser una gran potenciador del turismo en la región (40 millones de euros y 15 pasajeros en el mes de julio) o del gran corredor Pirenaico que la Unión Europea ha cancelado y que Francia ha rechazado.
Cuando hice la travesía transpirenaica tuve que recorrer la Junquera, lugar de entrada y salida de España y unión con Francia. Lo que hubiera podido ser un lugar de descanso y disfrute de la naturaleza, ahora es un pueblo de comercio con Francia, lleno de gasolineras, perfumerías y, por supuesto, bares de alterne.
Pero lo que más me preocupa son las palabras del responsable de marketing de Astún: «si es más corta (la temporada) no tiene por qué ser menos rentable porque también se tienen menos gastos». A ver, ¿quién ha contratado a este individuo? ¿Alguien le ha hablado de los costes fijos? O es que, ah, como no viene gente, el hotel gasta menos en limpieza. Ahora debías ir decirle al señor banquero que como hay menos turismo que le pagas menos de crédito.
Vuelvo a remitirte al proyecto del aeropuerto, que con 40 millones ha cerrado con todas sus tiendas y mantiene una plantilla de 20 personas. Por cierto, que en dicho aeropuerto operaba Pyrenair, compañía que también era participada por Aramón y que está ahora fuera de servicio.
Cerler a 10/03/2012 |
Vamos que estamos rodeados de mentes prodigiosas.
Además, llevamos un año de fracaso total en cuanto a nieve en el Pirineo se refiere. Así que mejor habría que recapacitar sobre las palabras de este gurú del marketing, ya que desde luego 15 días de nieve al año no amortizarán esta inversión en la vida.
Buscar negocios creativos y con respeto al medio ambiente y que desarrollen una región es mas difícil que ir a pedir dinero al papá Estado para multi-inversiones que nunca se recuperarán.
Por cierto, con el dinero que vais a gastaros en esto podríais pagar la deuda del aeropuerto y, así, decirles a los ciudadanos «bajaremos los impuestos ya que vamos cancelando deudas». Pero eso ya es demasiado pedir.
Podéis ver un avance de lo mal que va la temporada aquí.